El Ayuntamiento de La Puebla del Río, a través de su Delegación de Obras y Servicios, ha llevado a cabo en estas semanas la rehabilitación de cinco parques y zonas de juegos infantiles de la localidad, continuando así con el plan de mejora que se aplicará en todo el municipio.

En primer lugar, en el Parque Infantil situado entre las Barriadas de República Argentina y Las Marismas, se ha efectuado una rehabilitación integral de los juegos infantiles y la instalación de césped artificial y vallados nuevos. Cabe reseñar el pésimo estado en el que se encontraba el parque debido al vandalismo. Además, con el objeto de crear en el exterior del mismo una zona de ocio y descanso específica para las personas adultas y mayores, se han reducido las dimensiones de este parque infantil.

Por su parte, el Parque Infantil “Donantes de Órganos” se ha rehabilitado por completo, así como sus juegos infantiles. Igualmente, se ha producido la instalación completa de césped y se ha acometido una importante ampliación, consistente en solera de hormigón, césped e instalación de juegos trasladados desde la Barriada de la Paz, puesto que en dicha zona no tenían aceptación por parque de los vecinos y en su ubicación cuenta con gran demanda.

Tanto en el Parque de la Avenida Cerro Cantares como en el llamado “Bosquecito” – situado entre las calles Rocieros de La Puebla, Greco y Murillo –, el Ayuntamiento ha ejecutado labores de restauración de juegos infantiles, césped, pintura, vallado o, en el caso del segundo, reposición de las placas de amortiguación. Por último, el Consistorio ha actuado en el Parque “Laureano Borrego”, ubicado en la Barriada de “La Estacá”, con reposición de vallas que habían sido robadas, arreglo de juegos infantiles y restauración de los escalones del tobogán.

Del mismo modo, el Ayuntamiento continúa con su trabajo de arreglos diarios en cuanto a desperfectos generales ocasionados en el municipio mediante acciones de vandalismo. Todas estas actuaciones ayudan a disfrutar de unos parques en buen estado, ofreciendo así una buena imagen para el disfrute de la población infantil y sus familias, que debe contar con la ayuda del respeto por parte del resto de la sociedad, evitando actos vandálicos y otras acciones que conllevan la rotura, el destrozo y la inutilización de estos espacios.